Descansar no es dormir

por | 11 de diciembre de 2010

Las ganas de dormir se manifiestan por señales generales como bostezar, el frotarse los párpados, prestar menor atención a situaciones, pensamientos en vacío o la tendencia a colocarse en una posición relajante. Dormir se define como el estado de reposo en el que se suspende todo movimiento voluntario y toda actividad consciente, es una acción pasiva que llevamos a cabo a partir del cansancio. Dormir no implica soñar, y sin sueño no hay descanso.

Está comprobado que dormir no es lo mismo que descansar y un descanso sin sueño implica que las hormonas de crecimiento durante la adolescencia y la infancia sean afectadas. Cuando soñamos el cerebro borra de la memoria la información inútil y fija las experiencias que ha tenido durante la jornada. Lejos de ser una pérdida de tiempo el descanso fija una serie de etapas muy eficaces en la persona.

Algunas enfermedades neurológicas hacen desaparecer la necesidad de dormir. Cuando esto sucede, el organismo no sintetiza más las sustancias que provocan el sueño, por el contrario, el despertar voluntario provoca una acumulación anormal de estas sustancias, transformándose en tóxicas y provocando perturbaciones, cambios del humor, pérdida de la memoria, irritabilidad, debilidad y hasta paranoia.

Descanse, no duerma, dormir sin soñar no es aconsejable. Si desea comprar colchones Madrid no dude en visitar la mejor tienda online de colchones, AbsoluteBeds.com