Elige a un buen licenciado para tu divorcio

por | 25 de enero de 2011

El divorcio es un proceso de vida difícil de afrontar, ya que no solo implica desgaste físico y emocional, sino también, en algunas ocasiones, el pago de los servicios de un abogado para que agilice los trámites.

Sin embargo, como en otros ambientes, siempre hay quienes lucran con el dolor ajeno y con los problemas de los demás, así que debes ser muy observador en los siguientes aspectos:

  • ¿Tu abogado frecuentemente aplaza las citas para darte información sobre tu caso? ¿Cobra altos honorarios y te tiene cautivo durante meses o años?

 

  • ¿Frecuentemente te dice que es sencillo pero no te explica porqué? ¿Solo te dice que no debes preocuparte y que él lo resolverá todo? ¿Te engancha fácilmente en situaciones legales y luego te cobra altos honorarios?

 

  • ¿Tu abogado te pide que dejes todos “en sus manos” y mes tras mes incrementa sus honorarios porque tuvo que hacer esto o aquello para ayudarte? Si es así ten en cuenta que esto retardará el proceso y que, después de varios años, tal vez no quedes divorciado.

 

  • ¿Nunca se compromete con un plazo? ¿No te dice cuánto te va a costar todo el proceso?

 

Si estás pasando por cualquiera de las situaciones anteriores debes buscar la ayuda de abogados expertos en Derecho Familiar para que dejes de ser víctima de charlatanes (el amigo de tu hermano, tu “cuate” de la preparatoria, el licenciado de la empresa para la que trabajas, el que te recomendó el amigo de tu novio/a, etc.).

Pregunta a cualquier persona que haya pasado por lo mismo, así sabrás los desembolsos continuos que tuvo que hacer.

Ahora bien ¿cómo elegir a un buen abogado que maneje mi divorcio? Esta puede ser una tarea difícil, pero aquí tenemos algunas sugerencias de cómo hacerlo:

  • No necesitas un abogado personal. Los abogados deben ser elegidos para tareas específicas, en este caso para un divorcio.
  • Debes usar a los abogados cuando estás en una situación de crisis, como por ejemplo los daños corporales o en una situación de defensa judicial.
  • Al elegir no juzgues a los abogados por la edad, porque los hay buenos en todas las edades. Deja del lado la escuela donde haya estudiado, hay abogados malos en todas partes. No siempre las empresas grandes son realmente buenas o adecuadas a tus necesidades.
  • Busca una persona con sentido común, alguien que sepa de lo que estás hablando. Puedes determinar esto en una conversación telefónica o en la primera cita. Un factor muy importante es la discreción, además averigua si el abogado es discreto en su negocio y comprueba sus referencias. Ten en cuenta que vas a tener que darle mucha información personal.
  • Si trabajas durante el día, asegúrate de que el abogado esté disponible durante las noches para que puedas hablar con él.
  • No pienses solamente en los honorarios, es decir, fíjate también en cómo cobra y cómo espera ser pagado.