El significado del as de copas en las cartas del tarot

por | 14 de febrero de 2011

tarotPocas cartas del tarot tienen un significado tan profundo como el as de copas. Esta carta marca el inicio del palo de las copas, dedicado al amor y a los sentimientos. El as de copas marca esa brisa inicial de afecto que podría convertirse en el más puro amor si se le da el tiempo y la atención requeridos. Es el momento de plantar la semilla, y hacer una apuesta a futuro. Cuando esta carta sale representada nos habla de un corazón puro que se expresa con un amor no teñido por ninguna emoción negativa como la envidia o los celos.

Un concepto muy evidente de esta carta proviene de su semejanza con el Santo Grial, la copa sagrada en la que Jesucristo bebió durante la última cena. Igual que esta humilde copa, el as de copas propone una promesa, una nueva alianza, marca el comienzo de un nuevo amor. Pero como en los cuatro palos del mazo del tarot, el as sólo refleja el primer momento, donde aún el sentimiento no se ha expresado totalmente. Es una posibilidad a la que le falta aún realizarse en plenitud.

El as de copas no garantiza la felicidad, pero aseguraque la relación puede llegar a ser muy apropiada. Un buen comienzo es sólo eso: un comienzo. El consultante tendrá la oportunidad de encontrar la felicidad si tiene la capacidad de desarrollar una situación existente. Al igual que en el Santo Grial, el as de copas alimenta con el pan sagrado y calma la sed con el agua de la vida. Es evidente que  con estos elementos pueden nacer cosas muy buenas, así como del amor emergen todos los buenos sentimientos, la gratitud, la intuición, el perdón, la honestidad, la paz.

Pocas cartas del tarot son tan espirituales como el as de copas. Es aquí donde debe hacerse una distinción con otra de las cartas del tarot: los Enamorados. En este último arcano la relación es mucho más carnal, mucho más sensual. Puede no ser un enamoramiento permanente, sino una relación llevada por la atracción. En cambio, el as de copas señala un sustento mucho más íntimo, una raíz mucho más profunda. Y teniendo una raíz fortificada cualquier relación tiene la posibilidad de crecer mucho más sanamente. Aún sin aludir a una relación de pareja, el as de copas puede implicar una nueva etapa de crecimiento personal del consultante, mucho más iluminada y sabia.