La aerolínea estadounidense United Airlines se vio obligada a realizar un aterrizaje de emergencia en la ruta de uno de sus vuelos al derramarse el café de uno de los pilotos que comandaba la aeronave en el panel de control de la misma.
Según se ha difundido, el avión, que realizaba la ruta entre las ciudades de Chicago y Frankfurt, tuvo que aterrizar de emergencia en Canadá cuando la aeronave sufrió una avería tras el derrame del café del piloto sobre el tablero de comunicaciones, que provocó que el avión enviara por error y de manera automática señales de alarma de secuestro como consecuencia de un cortocircuito.
Tras el suceso, el vuelo 940 de United Airlines, un Boeing 777, fue desviado al Aeropuerto Internacional Pearson de Toronto, donde aterrizó sin mayores problemas en la noche del pasado lunes, día 3 de enero.
Al parecer, según la Dirección de Transporte de Canadá, el avión aterrizó en Toronto por decisión expresa del piloto, que prefirió no cruzar el Océano Atlántico con el tablero de comunicaciones afectado por el suceso.
El percance produjo que al derramarse el café, ello causara fallos en las comunicaciones del aparato, que comenzó a emitir falsas señales de socorro, como el código 7500, que indica una situación de secuestro o interferencia ilícita. United Airlines informó rápidamente de la avería en las comunicaciones con el vuelo.
La aerolínea, que efectúa vuelos transatlánticos a destinos españoles como los vuelos a Madrid o los vuelos baratos entre distintas ciudades norteamericanas, facilitó a los pasajeros su vuelta a la ciudad de Chicago, donde se les costeó el alojamiento necesario para volar hacia Frankfurt al día siguiente.