Es vox populi que Google siempre está buscando nuevas maneras de mejorar las prestaciones de su motor de búsquedas. Tomar en cuenta las directivas y sugerencias que hace Google con el objeto de instaurar mejores prácticas de posicionamiento web, suele ser la forma más inteligente y segura de hacer SEO para Google. El principal enemigo de Google siempre ha sido el Spam. Y muy especialmente, las granjas de enlaces, también conocidas como link farms. Hace poco tiempo, Google arremetió nuevamente contra las granjas de enlaces, anunciando la liberación de un nuevo algoritmo que promete dejarlas fuera de las páginas de resultados de búsquedas.
Ahora bien, qué hacer si en algún momento hemos incluido nuestros sitios en páginas que pueden ser consideradas granjas de links. No imagine a las granjas de enlaces como sitios resueltamente ilegales con intenciones evidentes de esconder información, diseñados con fondos negros y letras amarillas casi ilegibles. En rigor de verdad cualquier sitio, con una excesiva cantidad de enlaces salientes, y específicamente no relacionados con la temática del sitio puede ser considerado una granja de links. Por ejemplo, es muy común ver algunos “blogs” que prácticamente no publican nuevo contenido y que, sin embargo, tienen una extensa sección de “Nuestros Recomendados” o “Links Amigos”, o algo similar. Sin duda, el propósito último de estos sitios no es ofrecer valor al usuario, sino incluir los enlaces, muy comúnmente como parte de un plan de intercambio de enlaces.
Por lo tanto, nuestra primera tarea será revisar qué sitios nos están enlazando. Puede hacer esto desde varias páginas: en principio puede ingresar desde las Herramientas para Webmasters de Google, en el apartado Su Sitio en la Red, pinchando en Enlaces a su Sitio, pueda acceder a la lista de enlaces que apuntan a su sitio que Google recoge. Otra opción es ingresar en http://www.alexa.com/, escriba el nombre de su página en el cuadro de búsquedas, presione el botón de buscar, y en el apartado Sites Linking In encontrará la lista de enlaces entrantes. Es casi seguro que no habrá plena coincidencia entre los registros de Google y los de Alexa. Esto ocurre porque Alexa basa su información en los sitios que tienen instalada su barra. Sin embargo, como orientación le servirá.
Repase la lista de sitios que lo vinculan y proceda a solicitar que se elimine su enlace de aquello que considere que son granjas de links. A continuación inicie una campaña de creación de enlaces de calidad, que no impliquen ni la compra ni el intercambio de enlaces, ambas prácticas devaluadas a los ojos de Google como técnicas válidas de posicionamiento web.
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