Sistemas Biométricos: Análisis De Retina En Un Control De Acceso

por | 24 de marzo de 2011

Un estudio de retina es uno de los análisis biométricos más antiguos. Hace ya más de 70 años se pudo establecer que la disposición de los vasos sanguíneos, en los ojos, era diferente en cada ser humano. Con el pasar de los años, esta idea tomó fuerza, lo que hizo posible que se patentara el primer lector de retina, que luego salió al mercado a comienzos de los años 80.

Un registro de la retina, no sólo analiza esta parte del ojo, sino que también analiza la capa de vasos sanguíneos, en la parte posterior del mismo. Esto se hace usando una fuente de luz de baja intensidad y un lector óptico, que detecta de manera precisa los patrones oculares. Para que una persona se someta a este tipo de análisis, es necesario que se quite sus gafas, si las usa, coloque sus ojos cerca del aparato y mire hacía un punto determinado. Este punto es por lo general una lucecilla verde, a la que se debe ver con atención durante unos cuantos segundos, para que el mecanismo pueda hacer su trabajo. Por el general, el proceso de captura y cotejo de patrones toma alrededor de 10 segundos, por lo que el sistema no sólo es efectivo, sino también rápido.

Un escáner de retina es una buena opción como sistema de control de acceso, porque copiar una retina, con todos sus elementos, es una tarea imposible. Por otro lado, no se puede engañar al sistema con una retina de una persona muerta, puesto que su deterioro es muy rápido y porque existen sistemas que saben cuando están tratando con tejido vivo o no.

Es tal la efectividad de estos aparatos, que muchas áreas de acceso restringido como bases militares, plantas nucleares, embajadas, laboratorios, agencias de seguridad y otras grandes organizaciones; hacen uso de ellos. Estos lugares han encontrado en los lectores de retina un sistema de control de acceso inviolable y por sobretodo rápido. La razón por la que estas organizaciones acceden a estos lectores es porque son las únicas, que pueden darse el lujo de adquirir esta tecnología, ya que los precios de estos dispositivos son algo altos.

Las cerraduras biométricas pueden ser una buena estrategia, para mejorar la seguridad en lugares como empresas, viviendas, colegios, etc. Estas cerraduras están basadas en los sistemas biométricos y sólo se abren cuando se suministra una huella, previamente registrada.