Gastos que debes tener en cuenta al comprar tu vehículo

por | 7 de marzo de 2011

Cuando compras un coche, en la factura del concesionario vas a encontrar diferentes conceptos que se suman al precio final del vehículo. Estos conceptos corresponden a diferentes gastos que hay que cubrir para que el coche esté a punto en la calle.

Además, en Clickseguros te recomendamos que lleves también mirado con antelación los seguros de coche porque recuerda que es obligatorio tener el coche asegurado para poder circular. Por tanto, cuando salgas con el vehículo del concesionario, lo debes tener ya asegurado.

Es posible que el concesionario te ofrezca un determinado seguro de coche, pero nosotros te recomendamos que con antelación lo hayas mirado por tu cuenta. En Clickseguros puedes también calcular seguros de coche para que puedas elegir y contratar el que mejor se ajusta a tus necesidades y a las de tu nuevo coche.

A continuación te desglosamos los conceptos de la factura de la compra de tu coche para que no tengas ninguna duda:

Precio de fábrica: es el precio base, que es el mismo para todos los concesionarios de España, y es el que se basan para sacar el precio del coche sin impuestos.

Equipamiento opcional: si queremos añadir al coche algún accesorio que no venga incluido en la fabricación en serie de ese vehículo tendrá un coste que habrá que añadir al precio base. En este punto, el concesionario puede aplicarte ofertas o promociones por packs adicionales.

IVA: para la compra de un vehículo, el impuesto sobre el valor añadido es del tipo general, que desde julio de 2010 es del 18% sobre el precio base anterior.

Coste de transporte: puede oscilar entre los 100 y los 400€, y es lo que se paga porque te lleven el coche de la fábrica al concesionario.

Impuesto matriculación: El coste de este impuesto varía de una ciudad a otra, y lo puede gestionar el concesionario, o lo puedes hacer tú. Ahorrarás algo de dinero haciéndolo tú mismo, pero tienes que valorar si te compensa el tiempo que te va a llevar esta gestión.

Este impuesto se calcula en función de las emisiones de CO2 del coche a la atmósfera. Actualmente hay cuatro tramos:

Coches con menos de 120 gramos por km de emisión: no pagan impuesto

Coches que emiten de 121 a 159 gramos por km: pagan el 4,75%

Coches que emiten de 160 a 199 gramos por km: pagan el 9,75%

Coches que emiten más de 200 gramos por km: pagan el 14,75%

Matriculación: incluye una serie de gastos adicionales como son la licencia para el coche, las placas de matrícula y los gastos de gestoría. En la factura pueden aparecer como un único concepto.