Zaragoza: la basílica del Pilar y mucho más

por | 8 de diciembre de 2010

Zaragoza es la capital de Aragón ubicada a orillas de los ríos Ebro, Huerva y Gállego, así como del Canal Imperial de Aragón.

No hay duda que el primer reclamo turístico de la ciudad de Zaragoza es la Basílica del Pilar, un imponente templo barroco que, desde hace cinco años, es uno de los destinos de peregrinación más importantes del mundo católico. Su retablo mayor del siglo XVI, obra de Damián Forment, está realizado en alabastro policromado. Enfrente se encuentra la sillería del coro, una talla en roble de estilo renacentista de gran valor artístico. La Santa Capilla, obra maestra del arte dieciochesco diseñada por el arquitecto Ventura Rodríguez, alberga la imagen de la Virgen del Pilar. Los frescos de la bóveda del Coreto son obra del genial pintor aragonés Francisco de Goya, mientras que las demás cúpulas son obra de sus cuñados, Ramón y Francisco Bayeu.

La huella de Goya se puede seguir en otros lugares de la ciudad: el Museo de Zaragoza, el Museo Camón Aznar y la Cartuja de Aula Dei.

Sobre el solar de la mezquita mayor de la antigua ciudad musulmana se levanta La Seo, un edificio que aúna un conjunto de estilos que abarca desde el Románico hasta el Neoclásico. En el exterior encontramos el muro de la Capilla parroquial de San Miguel arcángel, obra cumbre del mudéjar zaragozano.

El palacio de la Aljafería es uno de los principales exponentes de la arquitectura hispanomusulmana del siglo XI. El edificio se ha visto sometido a numerosas reformas a lo largo de su historia. La más importante de ellas fue emprendida por los Reyes Católicos en 1492. La parte más antigua data del siglo IX y se corresponde con la”Torre del Trovador”, una barbacana defensiva de planta cuadrangular llamada así por un drama de Antonio García Gutiérrez que, además, sirvió de escenario a Giuseppe Verdi para su famosa ópera Il Trovatore. El Palacio ocupa un triste lugar en las páginas negras de la Historia pues, desde 1485, fue sede del Tribunal de la Santa Inquisición, con sus lóbregas mazmorras y su cuartel de tropas. En la actualidad, el Palacio de la Aljafería es la sede de las Cortes de Aragón.

En Zaragoza encontramos cuatro torres mudéjares declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. El arte mudéjar combina influencias del arte islámico y otros estilos arquitectónicos occidentales -fundamentalmente, el gótico-. Los monumentos mudéjares –cuya construcción se prolongó hasta principios del siglo XVII– se caracterizan por el ingenioso uso del ladrillo y de la cerámica vidriada, como se puede apreciar en las torres de la Magdalena, San Pablo, San Miguel y San Gil.

La antigua Lonja de Mercaderes es el mejor ejemplo de arquitectura civil renacentista aragonesa. En la actualidad, este edificio se utiliza como sala de exposiciones.

Los hoteles en Zaragoza ofrecen una atencion muy profesional , y con una prolongada trayectoria propia de una ciudad que es cruce de caminos y lugar de encuentros, acostumbrada a la recepción de un turismo asociado a la cultura, al mundo empresarial y al ámbito científico y universitario. A los hoteles tradicionales se unen las modernas propuestas surgidas a raíz de la Exposición Universal de 2008.