Aunque tu cuarto de baño sea pequeño, existen soluciones en el hogar para colocar los muebles de lavabos de forma impecable y funcional.
No siempre el lavabo en el centro de la encimera
Lo habitual es colocar el lavabo en el centro de la encimera pero, en baños con el espacio reducido, puede ser que el lavabo quede demasiado cerca de la puerta y la entrada resulte molesta. Lo puedes evitar desplazando el lavabo a un lado de la encimera, siempre que con ello mejores la distribución del baño. Puedes optar por un mueble realizado a medida, en el que la encimera de madera se diseñe con unas dimensiones tales que pueda acoger el lavamanos en un extremo. Bastaría con ensancharla un poco y redondearla para adaptarla a la forma del lavamanos.
Baños muy alargados y estrechos
Para un baño de planta estrecha y alargada esta idea es genial: una encimera de menor fondo que las convencionales con un lavabo semiencastrado y la grifería al lado. Así se aligera el espacio y se gana libertad de movimientos. Además, si colocas una balda debajo, ganarás zonas de almacén.
Lavamanos con cubeta rectangular
Con un mueble de lavabo abierto, sin puertas y de reducidas dimensiones, puedes solucionar la escasez de metros. También conseguirás un baño a la última si el mueble tiene un diseño depurado y un lavamanos con cubeta rectangular. Una buena sugerencia, si el estilo de tu baño te lo permite, es el acabado wengué para el mueble y el zócalo frontal ya que te hacen destacar aún más la porcelana y el brillo del lavamanos y la grifería.
Lavabo tipo vasija
Este tipo de lavabo tan original encaja muy bien en un mueble compuesto por dos módulos que se complementen y que permiten aprovechar el espacio al máximo. En el superior se puede instalar el lavabo, tipo vasija, y en el inferior se puede hacer un práctico armario con dos puertas. Además, entre ambos aún puede quedar espacio para almacenar por ejemplo las toallas dobladas de forma muy decorativa.
¿En menos de 1 m?
Elige un lavamanos suspendido, con un bonito diseño rectangular y una mínima encimera, y coloca debajo un mueble con baldas; si es de color claro, aligerarás visualmente el espacio. Para organizar mejor todo lo relacionado con el aseo, recurre a cestas y cajas; te ayudarán a ocultar los artículos menos vistosos.
Simplifica al máximo, sin renunciar a lo decorativo, con diseños en lavabos y encimeras que queden suspendidos, es la solución más actual y vanguardista.