Primero que nada hay que ubicar los puntos de mudanza y las rutas más efectivas para el traslado. Fija tiempos para tu mudanza, esto es importante porque de lo contrario las prisas pueden obstruir tus planes y hacer que todo salga mal. Un buen consejo para realizar tu mudanza es contratar un servicio de minibodegas, ya que te serán muy útiles para almacenar tus cosas y además, si lo necesitas, podrás almacenarlas durante unos días o más, según la compañía y el contrato que hayas elegido.
Decide los espacios en compañía de tu familia. Delimita áreas comunes y ponte de acuerdo sobre quien ocupará cada espacio.
Inicia tu mudanza. Si contrataste el servicio de minibodegas te será más fácil el proceso. Lo primero que has de hacer es revisar qué es lo que sirve y lo que no sirve (ropa vieja y malgastada, cuadernos y material escolar inservible, aparatos y muebles deteriorados, revistas, etc.).
Selecciona qué vas a llevarte a tu nueva casa y que no, muebles y electrodomésticos en buen estado son fáciles de vender. Elige la ropa que vas a usar y la que no usarás más.
Si haces viajes a la casa donde te vas a mudar tienes que aprovechar las vueltas e ir dejando unas cuantas cosas de vez en vez. Según el vehículo que uses inicia por llevar los muebles más grandes. Llena los huecos del vehículo con diversas cosas que se acoplen al tamaño. Es recomendable que realices el movimiento y los viajes en un horario cómodo, es decir, que no haya mucho tráfico y calor. Con una minibodega puedes llevar todo en un solo viaje.
No olvides que hay que recolectar cajas y más cajas en buen estado, para usarlas en la mudanza. Empaca tus artículos de limpieza, jabón, shampoo, una buena cantidad de bolsas de basura, escobas y trapeadores.
Ahora tienes la oportunidad de empezar de nuevo, siempre es agradable darle un giro a tu vida ¿no? ¡Haz tu mudanza y deja atrás las cosas negativas, comienza una nueva vida!