Insonorización y la ingeniería acústica

por | 14 de junio de 2010

Debido al notorio aumento de la contaminación acústica la insonorización de recintos cobra cada vez más importancia. Pues las actividades industriales, el tráfico urbano y el tráfico aéreo comprometen la salud de las personas. Para resguardarse del ruido exterior hay que aislar acústicamente los recintos.

Pero la insonorización implica una doble dirección: no solo hay que evitar que el ruido exterior penetre y distorsione el sonido de la sala sino que también que el sonido que produce salga al exterior.

Para conseguirlo se puede elegir entre dos posibilidades según las necesidades propias:
Aislamiento acústico y acondicionamiento acústico.
El aislamiento acústico permite proporcionar una protección al recinto contra la penetración del ruido.
En cambio, el acondicionamiento acústico mejora la cualidad acústica del recinto, controla parámetros como el número de las reflexiones sonoras, resonancias modales, el tiempo de reverberación, etc.

Un buen ejemplo para medidas correctivas de control de ruido son las barreras acústicas o comúnmente llamada paredes sónicas.
Estos dispositivos son métodos efectivos de mitigación acústica de las carreteras, y mitigación de fuentes de ruidos de vías férreas e industriales.

La disciplina especializada en esto sector es la ingeniería acústica que controla y desarrolla los procesos emisión, transmisión y recepción de ondas sonoras a través de diferentes medios físicos y que ayuda a resolver problemas de emanaciones de ruidos y vibraciones.

Además se dedica a la producción musical, manejo y desarrollo de medios audiovisuales, como por ejemplo, el desarrollo de sistemas de reproducción de sonidos lógicos reales Dolby Surround Sound.