Enfrentarse a la comida luego de una cirugía bariátrica resulta difícil para muchas personas, más aún cuando deben cocinar para sus familiares. Tener que llevar una dieta líquida durante un tiempo les parece demasiado sufrimiento aunque en realidad no sientan hambre ni ganas de comer. Sin embargo, extrañan la comida.
Al comenzar a cocinar para los demás las tentaciones con las que debe convivir pueden generar angustia, ansiedad e incluso hacerlo perder el control en más de una ocasión, poniendo en riesgos su progreso y su salud.
Esta situación tan tensa y difícil puede evitarse aunque las soluciones requerirán de un fuerte compromiso familiar. Lo primero es evitar cocinar durante algún tiempo. Hasta que Ud. se sienta seguro con su dieta y pueda manejar eficazmente las tentaciones es conveniente evitar la cocina. Pida a su pareja o a algún familiar que realice la comida para los demás e incluso la suya propia. De indicaciones estrictas de lo que puede o no comer y recuérdele a la persona que cocinará que algún cambio no previsto puede perjudicarlo.
Una vez que esté a gusto con su tratamiento y pueda afrontar las dificultades puede comenzar a preparar los platos familiares. Es recomendable cocinar lo menos posible y congelar la mayor cantidad de comida, así sólo bastará con sacar la porción y calentar. No pasará tiempo extra en la cocina rodeado de tentaciones y tendrá cada plato listo en cuestión de minutos.
Es preferible que cocine luego de comer. Luego de desayunar puede preparar los platos del almuerzo y cena o si planea adelantar la comida de la semana, hágalo luego de almorzar. Si Ud. tiene apetito mientras cocina es más probable que empiece a probar de aquí y de allá que si está con el estómago lleno. Si aún así siente ansiedad por comer algo tome una bebida con gas (las burbujas dan mayor sensación de saciedad) o coma alguna colación saludable como una fruta fresca o un yogurt pequeño.
Estas pequeñas reglas le permitirán mantener el control mientras cocina. Si a pesar de seguir nuestros consejos se siente inseguro y ansioso piense en todo lo que conseguirá si sigue por el camino del tratamiento y recuerde lo mal que se sentía antes de comenzar. Estas ideas positivas seguramente lo alentarán mucho y podrá encontrar las fuerzas para continuar.
Un saludo,
Dr. Hector Bernal
www.adios-obesidad.com
Sobre el Autor:
Héctor Bernal es Médico Cirujano especialista en cirugía metabólica y de obesidad
Profesor titular en la Escuela de Medicina de la Universidad Autónoma de Chihuahua en Chihuahua México