Alierta

por | 22 de junio de 2010

Alierta,  presidente de la multinacional española Telefónica, tiene un proyecto de futuro: quiere que su compañía se convierta en la mejor empresa del sector.

Según publicó recientemente el periódico económico Cinco Días, durante unas reuniones internas celebradas recientemente, Alierta pidió a sus ejecutivos que aumenten los ingresos de aquí a 2012 hasta llegar a una facturación de 70.000 millones, o sea un aumento de 14.000 millones, que sería más de lo prometido a los inversores. Alierta también quiere ampliar el número de clientes desde los actuales 260 millones hasta los 320.

Alierta, añade Cinco Días, quiere, con este objetivo, ser el número uno del mundo digital lo que podría implicar que la operadora española quiere superar en valor a las dos telecos globales por delante de ella en Bolsa, Vodafone y AT&T -China Mobile se dedica sólo al móvil-, pero es sobre todo una cuestión filosófica, ya que ser mejor no significa necesariamente valer más, explican fuentes de la compañía. La idea es que las personas, los negocios y los hogares son cada vez más digitales, y eso hará que las operadoras puedan ampliar sus servicios a otros ámbitos, como el financiero, la salud o el entretenimiento.

Este objetivo de los 70.000 millones que ha planteado César Alierta supondría un incremento del 23% respecto al 2009.

Para lograrlo, Alierta ha impulsado en Telefónica una estrategia a tres años, llamada Bravo, “destinada a acelerar el proceso de transformación necesario para asegurar, de manera eficiente y también sostenible, la captura del potencial de crecimiento del sector”, según fuentes del grupo. Esta estrategia está apoyada en cuatro columnas fundamentales: las plataformas, el cliente, la oferta y la cultura.

Alierta marcó a sus directivos hace unos años unas proyecciones financieras para 2009 más elevadas que las que el mercado esperaba, pero la crisis se encargó de que no pudieran cumplir ese objetivo.

La pregunta del millón es si César Alierta será capaz esta vez de que Telefónica logre estos objetivos. La verdad es que tiene muchas cosas a su favor, y alguna en contra.

A favor, tiene Alierta una empresa que disfruta de una posición hegemónica en numerosos mercados. Esta realidad no va a cambiar a corto plazo. Hay que recordar que la multinacional española está presente en más de 20 países, y en todos ellos la empresa de Alierta es un jugador clave.

Por otra parte, los recursos con los que cuenta Alierta no son desdeñables, tanto en liquidez como en recursos humanos –recordemos que más de 200.000 profesionales trabajan para el grupo que dirige César Alierta.

Alierta, por último, ha demostrado en el pasado que es capaz de doblar en pocos años la cifra de negocios de un grupo enorme como Telefónica. ¿Será capaz de lograr sus objetivos de nuevo?

Enfrente tendrá a poderosos rivales, pero cuenta con unos cuantos ases en la manga.