Cualquiera que lleve un tiempo navegando por Internet sabe lo difícil que es a veces no caer en el engaño ¿Cómo ignorar un email que nos dice si queremos saber que amigos nos han borrado de su messenger? ¿Cómo no ponernos en alerta cuando recibimos un presunto email de nuestro banco diciendo que ha habido algún tipo de problema pidiéndonos acceder a nuestra cuenta? ¿Y que decir de los emails donde hemos ganado algún tipo de premio? Algunos de ellos podría parecer que son tan antiguos y conocidos y que todo el mundo conoce. Pero nada más lejos de la realidad ¿O acaso no es menos cierto que timos tan antiguos y burdos como “El timo de la estampita” se sigue cometiendo hoy en día?
Si bien el email es el medio de entrada en nuestra casa de los ciberdelincuentes, no es menos cierto que en muchas ocasiones somos nosotros mismos los que “salimos de compras” y somos engañados. Anuncios de propuestas de negocio extraordinarias “Gana 50€ por cada email que envíes”; Ofertas de empleo en las que te piden algo por adelantado o esas otras en las que para solicitar la entrevista has de llamar a un teléfono de tarificación especial: 803, 806, 807, 905; Venta de artículos de lujo: Relojes, bolsos, etc. A un precio extraordinariamente bajo.
Todos estos ejemplos y otros muchos más, a los que hemos de añadir los que seguro ahora mismo están en marcha (los delincuentes no descansan) son, en la mayoría de los casos, fácilmente evitables. Basta tener unos mínimos conocimientos sobre navegación segura y aplicar a otros el sentido común. Sobre todo prestar atención a los detalles y al mínimo dato sospechoso desconfiar y buscar información: Compra-venta segura, delitos informáticos, etc.
No te dejes engañar. Si tienes un blog y quieres poner tu granito de arena en la lucha contra el fraude en Internet, puedes hacerlo colaborando en la campaña “Por una Internet segura, Lucha contra el fraude.”