La capital catalana es una urbe con carácter muy definido: si nos la imagináramos como una persona diríamos que es muy abierta, que se relaciona con gente muy diferente, que que lleva ropa muy moderna y que va a los locales más elegantes, pero también se mueve por los lugares más populares. La gastronomía catalana refleja el carácter cosmopolita, lleno de contrastes, de Barcelona, ya que los barrios más antiguos se mezclan con locales de lo más moderno, y a la inversa.
Durante el siglo XV empezaron a desarrollarse los métodos culinarios propios de la comunidad catalana, y ya entonces había alimentos del campo y también del mar, así como la mezcla de ambos. El mejor ejemplo de la combinación de los dos productos son los platos de “mar i muntanya” (mar y montaña).
¿Dificultades en escoger el plato más típico o mejor de pescado? La elección será complicada, ya que la gastronomía catalana ha aportado una gran cantidad de platos típicos de la región con guisos de pescado, como los suquets, una salsa típica de la costa de Tarragona elaborado en sus orígenes por los pescadores, o la zarzuela, un estofado de diversos pescados y mariscos. Además, por este barrio hay muchos apartamentos de alquiler, si te interesa alojarte delante de la playa, por lo que puedes consultar la siguiente web de alquiler apartamentos en Barcelona.
Por otro lado, l’Escudella (una especie de cocido muy, muy popular en Cataluña) es otro de los platos conocidos, así como la “calçotada”, a la que se recomienda ir si se tiene la oportunidad, ya que actualmente ser ha convertido en un evento social muy habitual en la ciudad condal y sus alrededores. Se llevan a cabo durante el final del invierno y comienzos de la primavera y consisten en comer los calçots, una variedad de cebolletas especialmente cultivada para este propósito que se asan directamente sobre brasas de sarmientos y se comen con la mano
No podemos olvidarnos del tradicional “pa amb tomàquet”. En muchos restaurantes se hace con pan de coca, que es más crujiente, y con un poco de aceite de oliva y sal. Los embutidos especialmente el fuet de Vic y las butifarras de diversas composiciones (butifarra de huevo, butifarra blanca, butifarra negra…) también son uno de los platos fuertes de la comunidad catalana. También, las salsas como el romesco y el allioli son las más características de esta cocina.
Finalmente, no hay que olvidar que Cataluña ofrece una gran diversidad de restaurantes con cocina de todas partes de España, así como de cocina internacional. aunque Barcelona es la ciudad con más restaurantes, los que tienen más reputación y se consideran más buenos son el “Sant Pau” de Carme Ruscalleda que se encuentra en Sant Pol de Mar; el restaurante “Can Fabes” de Santi Santamaría, situado en Sant Celoni y “El Bulli” de Ferran Adrià, que se encuentra en Rosas (Girona).