Mendoza es una de las regiones del mundo que mejores escenarios tiene para la práctica de los deportes aventura. En este sentido, la geografía mendocina ha sido bendecida por multitud de parajes naturales que se prestan maravillosamente para la práctica del rappel, del trekking, del andinismo, del rafting y del parapente. El secreto radica en su topografía tan particular, con altos picos en la zona oeste, y luego un suave declive hacia la zona este terminando en una planicie. Además, toda la provincia está surcada por caudalosos ríos y arroyos, producto de los deshielos y de los glaciares andinos. A medida que estos ríos han sido aprovechados para la generación de energía hidroeléctrica, se han formado numerosos lagos artificiales, que también posibilitan la práctica de actividades acuáticas como la navegación a vela, el windsurf, o el canotaje. En suma, en Mendoza el turismo aventura se ha convertido en una de las principales actividades de la región.
Anualmente miles de deportistas de todo el mundo acuden a los ríos mendocinos en busca de sus rápidos, que son de los más valorados por su grado de dificultad. Pero también Mendoza ofrece segmentos de cursos de agua ideales para el esparcimiento y la práctica no competitiva. El río Atuel que cruza la geografía provincial de oeste a este ofrece sectores con grado de dificultad 1, que permiten que personas sin experiencia y que están dando sus primeros pasos en la práctica de este apasionante deporte encuentren un lugar seguro para hacer rafting y divertirse. Cerca de San Rafael se encuentra la localidad de Valle Grande, desde donde parten gran cantidad de empresas para prestar los servicios adecuados al turismo. Por lo general, los practicantes son llevados en camionetas 4×4 a la zona desde donde se inicia el recorrido, y son provistos de todos los elementos de seguridad para alcanzar una experiencia inolvidable, aún hasta para los más pequeños.
El río Mendoza también ofrece tramos con grado de dificultad mayor, entre II, III y hasta IV. La ventaja del río Mendoza es su cercanía con la ciudad capital, apenas distante unos 30 km. Muchas empresas ofrecen excursiones de medio día de duración, perfectas para quien esté por obligaciones laborales en la ciudad de Mendoza y tenga algunas horas libres para vivir una experiencia energizante y renovadora. El turismo en Mendoza cuenta con toda la estructura necesaria para aprovechar estos paradisíacos lugares, y poner al visitante en estrecho contacto con la increíble naturaleza del lugar.