Una de las especialidades de la península Ibérica es sin duda el Jamón, y eso no es solo para la calidad de su carne, desde la ganadería hasta su tratamiento, como por ejemplo la manera de cortarlo que es muy importante y pasa por manos muy expertas. A veces los cortadores son campeones de España en el corte profesional del jamón ibérico para que el jamón mantenga su calidad especial; incluso su manera de ser transportado no es menos importante.
Para comprar jamon Iberico se debe estar cuidado a su aspecto antes de todo: se caracterizan por ser estilizados y alargados, y tienen la pezuña de un color oscuro. Muy importante es que su color sea entre el rosa y el rojo púrpura, que su textura sea no mucho fibrosa y que su grasa sea brillante, y también fluida y blanda al tocarla.
Otro elemento de no olvidar cuando se elija un jamón Ibérico es la vitola del Consejo Regulador de la Denominación de Origen. Según la alimentación del cerdo, estos se clasificarán en, cerdo de recebo, cerdo de pienso y cerdo de bellota.
El jamón de bellota proviene de un cerdo que cuando llegue a pesar entre los 80 y 110 Kg., empieza a comer solo bellotas y pastos naturales, hasta que llegue al menos el 50% de su peso.
El jamón de recebo es aquel que en la montanera combina una alimentación de bellotas y pastos naturales.
En cambio el jamón de pienso proviene del cerdo alimentado de pienso.
Además hoy es muy simple comprar jamón Ibérico y lo puedes hacer tranquilamente de tu casa ordenándolo por internet en sitios fiados y recomendables y poderlo gustar dentro unos días sin que pierda su calidad.